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Villa Constitución
“La vida o Dios por algo te ponen en algún lugar”
Descubrió la pasión por su profesión una vez iniciada la carrera, “estaba abocada a trabajar en la iglesia y ayudar desde ahí a los demás, entendí que a través de la medicina lo podía hacer desde otro lugar”, contó.
La doctora Ruth Bressan fue elegida como la personalidad de nuestra ciudad de esta semana para compartir con nuestros lectores un poco más sobre su historia personal y profesional.
Nació en Uranga, y a los 14 años llegó con su familia a Villa Constitución para poder continuar con sus estudios en el nivel secundario.
Se autodefine como una mujer feliz y conforme con lo que ha logrado en su vida. “Si bien hubiera querido hacer más cosas, estoy satisfecha con lo que tengo y lo que hago”, sostuvo.
Su pasión por la medicina la descubrió a medida que iba avanzando en la carrera, un estudio universitario que comenzó sin sentirlo su vocación, algo que cambió radicalmente con el correr del tiempo. “La vida o Dios por algo te pone en algún lugar, ¿no?”, analizó.
En relación al por qué de la especialidad elegida, explicó que siempre le gustó operar, “y en aquella época no nos permitían a las mujeres ingresar a hacer cirugías generales. En ginecología sí se permitía, por eso opté y realmente me apasiona. Amo lo que hago”.
Ruth, tiene una vida muy ligada también a ALCEC, en donde presta sus servicios hace 33 años. “El Dr. Maino estaba para retirarse, entonces él y la doctora Carolina García fueron a buscarme para ver si quería tomar su reemplazo. Así empecé, y desde ahí estoy siempre con la institución”, contó. Hoy conocemos un poco más de la vida de Ruth Bressan.
¿Dónde nació?
En un pueblo muy chiquito que se llama Uranga, después viví en Coronel Domínguez, y a los 14 años nos vinimos con mi familia a vivir a Villa Constitución. Sucedió que en aquellos pueblos no había escuela secundaria y como mis padres querían que nosotros estudiáramos se dieron las cosas para venirnos para acá.
¿Dónde estudió el Secundario?
En la Comercio, fue realmente una preciosa escuela y tengo los mejores recuerdos. Fue una etapa hermosa para disfrutar con los compañeros, además siempre fui muy estudiosa y me gustaba ir con todo aprendido y hecho.
¿Cómo continuó sus estudios?
Empecé a estudiar medicina, no porque hubiera sido mi vocación desde siempre sino porque se fueron dando las circunstancias. Cuando arranqué realmente me apasionó y me dije, nunca podría haber hecho otra cosa. A medida que iba cursando me daba cuenta de lo importante que era. Cuando era más joven estaba abocada a trabajar en la iglesia y ayudar desde ahí a los demás, descubrí que a través de la medicina lo podía hacer desde otro lugar.
¿Tiene algún hobby o pasión?
Me gusta mucho leer, tomar mate y mirar el río. Gracias a Dios vivo en un lugar privilegiado que veo el río desde la mañana hasta la noche. Juntarme con mis amigas. Los fines de semana ir al cine o al teatro. Y viajar todo lo que puedo.
¿Qué nos puede contar de la familia que ha formado?
Me casé en su momento con Esteban Martín, después nos separamos. Tuvimos dos hijos, el mayor Diego Martín que ya lo conocen y Maite, la menor, que es antropóloga. La familia se agrandó hace 7 meses con la llegada de Manuel, el hijo de Diego.
¿Cuáles son sus lazos más fuertes?
Mariángeles Jeich, Nacha Muñoz, Ana María Sequeira, Cecilia Quilicci, Gabriela Longo y varias más.
¿Cómo define a Ruth Bressan?
Una mujer que a lo mejor no ha podido hacer todo lo que quiso, pero siempre quiso todo lo que hizo y lo que hace. Eso realmente me hace feliz. Por ahí hubiera querido hacer muchas cosas más que no se me dieron, pero realmente amo lo que tengo y lo que hago.